Jhon Carlos Fernández Villadiego, conocido globalmente como Till High, no es un personaje creado, es una identidad renacida. Nacido en Barranquilla, creció entre códigos de la calle y valores del hogar. Se tatuó las cicatrices de su historia, pero nunca renunció al romanticismo.
Till High representa una nueva masculinidad en la música latina: poderosa, fiel, sensual, emocional y leal. Abandonó lo oscuro no por debilidad, sino por amor. Su arte es testimonio de esa transformación. Y su legado se escribe desde el corazón, con el fuego de quien sobrevivió para amar.